¿Qué es el estrés y cuáles son sus causas? Son las primeras interrogantes que se me ocurren, al iniciar el tema. Un fisiólogo austriaco llamado Hans Selye, fue el que acuñó el vocablo; para nombrar a las alteraciones psicofisiólogicas. Actualmente, ya se está de acuerdo, en la existencia de dos grandes tipos de estrés: el físico y el psíquico. El estrés físico debe haber existido siempre, y ocurre cuando por agotamiento del organismo; se altera el funcionamiento de los sentidos, la respiración y hasta la circulación sanguínea. Si esta situación se prolonga demasiado, se producen daños muy graves en el organismo. Por lo general, este tipo de estrés se cura con un buen descanso y, de ser posible, un cambio de ambiente.
El estrés psíquico, especie de ansiedad extrema; de hecho es una enfermedad aparecida dentro de los últimos cincuenta años. ¿Cuál o cuáles son sus causas? Diría yo, que la principal es el hacinamiento en que se vive en las ciudades modernas. La total contaminación de nuestra atmósfera, la alimentación, que en un gran porcentaje, ya no puede llamarse natural. Alguna vez, vi, en un noticiero, que cierto biólogo estudiaba a las ratas. Al sobre poblar su espacio vital, estas, es decir las ratas, se tornaban agresivas.
El mismo comportamiento, que muchas veces, tiene la persona estresada. Sesenta o más años atrás, el común de la gente apenas si conocía la radio, la televisión no existía, en la forma demencial que hoy existe; la telegrafía y telefonía utilizaba hilos trasmisores. Nuestra atmósfera, que entonces denominaban éter, estaba limpia de ondas electromagnéticas. A santo de qué, hago todas estas divagaciones. Pues, permítaseme que me explique: El cerebro humano es el mecanismo más fino, preciso y delicado que existe en nuestro cuerpo. Dicen, que la masa cerebral se halla compuesta de neuronas y fluidos neurotransmisores. Y maneja a nuestros músculos, y en general, a todo nuestro organismo, ayudado por el sistema nervioso. ¿Cómo lo hace? Simplemente igual que las computadoras, utilizando, para ello, ondas electromagnéticas; posiblemente de frecuencias muy especiales y con bajísima potencia. Ahora bien, es cosa sabida que una frecuencia de ondas electromagnéticas puede alterar a otra; de frecuencia parecida o muy cercana; especialmente si su potencia es mayor. En radio y TV. A ese fenómeno, le llamamos interferencia; lo que nos lleva a deducir, que el funcionamiento de nuestro cerebro puede ser interferido, o ¿no? ¿Qué frecuencias, son las más peligrosas? Desde mi punto de vista, casi todas; pero especialmente la ultracortas; como las usadas en los hornos de microondas, la telefonía celular; etc. Los rayos X, son peligrosísimos, por lo tanto son usados; tomando muchas precauciones. Sería interesante, hacer un seguimiento a quienes viven en las cercanías de las antenas; que emitan ondas ultracortas y a los que abusan del uso, de teléfonos celulares; para confirmar o descartar, estas sospechas.
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