miércoles, 19 de noviembre de 2008

ORTO, CENIT Y OCASO

Alguien, muy observador, lo dijo alguna vez y yo lo leí, no recuerdo si en “Leoplán”, “Caras y Caretas” u otra revista, que “en el mundo todo tiene su orto, su cenit y su ocaso”. Aunque, algunas veces, mucha gente y muchas cosas, alcanzan su nadir, sin nunca haber llegado a su cenit. Digo este intríngulis por que acabo de leer un artículo, escrito por uno de tantos críticos de la política internacional; quien afirma que el ocaso de “Yanquilandia” ha comenzado. Según dice, lo ha visto muy claramente, en la crisis económica que vive el coloso del norte, en la elección de un presidente de raza negra, ellos que siempre fueron (yo diría…que lo siguen siendo) los mayores discriminadores raciales; en el mundo. Además, dice este crítico, que los norteamericanos volverán de oriente como el perro del cuento, apaleados y con la cola entre las piernas. ¿Será? Que son los mayores consumidores de drogas y de alcohol, de todo el planeta. Que su vanidad y sus dólares, les hacen sentirse superiores a los demás y no toman en cuenta, para nada, sus orígenes de angurrientos invasores, aniquiladores de los pieles rojas y depredadores de la flora y fauna del continente; además, los que mayor contaminación lanzan a la atmósfera. A propósito, y esto lo digo por mi propia observación, parece ser que el ocaso de la Vida en el planeta, sí se ha iniciado. El hombre, tratando de conseguir mayores comodidades, deleites y placeres para sus sentidos; se está destruyendo a si mismo y de paso, a la madre Naturaleza. La contaminación de mares, lagos, lagunas y ríos es cada vez, mayor. El consumo de petróleo y sus derivados esta destruyendo la atmósfera y también, es la causa de los violentos cambios climáticos. Montañas nevadas que he conocido, ya no tienen nieve, ni para muestra. Los modernos inventos: La radio, Televisión y especialmente los teléfonos celulares; (las microondas son muy penetrantes) están dañando los cerebros de la gente. Cada día, hay más y más enfermos de Pánico, síndrome de Halzeimer y otras alteraciones neurocerebrales. ¿Por qué, la “Organización Mundial para la Salud”, no hace algo al respecto? Muchísimas ciudades alrededor de todo el mundo, pero especialmente las ciudades capitales, tienen un cinturón de pobreza a su alrededor; allí, la gente vive hacinada en habitaciones hechas de cartón, sin agua potable ni desagüe; alumbrados por velas que, innumerables veces, han sido la causa de incendios; de barrios enteros. El Papa, que según cuenta Maradona, vive en habitaciones con techo de oro y es el representante de Cristo, en la tierra; debiera hacer algo por esta gente y… los cardenales y obispos también. ¿Cuándo van a practicar, lo que predican?

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