miércoles, 23 de abril de 2008

INJUSTICIA CON LOS JUBILADOS

¿Quienes son los jubilados en el Perú? Son, los ciudadanos que se han pasado trabajando entre 20 a 40 años o más. Durante ese periodo de tiempo, han aportado, de sus sueldos, una buena cantidad de dinero. Sin embargo, los jubilados son maltratados, en muchas formas, por los gobiernos en cuya elección han intervenido, engañados por promesas que los políticos jamás cumplen; por ejemplo el actual presidente les ofreció mil soluciones…¿Y? Nones, solo bla, bla,bla. El dinero, que el gobierno recauda para el pago de los jubilados, por ley, es intangible. Esto, según la Real Academia de la Lengua, significa que NO SE PUEDE TOCAR. Aquí, en el Perú esa palabra significa, malversación, latrocinio. En la época del gobierno acciopopulista, se tomaron millones de soles del dinero de los jubilados, para hacer la autopista hacia las playas del sur donde, por supuesto, los grandes beneficiados fueron los millonarios y los políticos de aquella época, que tenían sus residencias de verano, en dicha zona; se hicieron construcciones inútiles, como las que existen en la av. Wilson; etc. Este, es solo unos ejemplos de los muchos casos; como consecuencia de esos malos manejos, el jubilado recibe una miserable cantidad mensual. Otra cosa, aquí no se respeta la no retroactividad de las leyes de jubilación; por el contrario, estas leyes se modifican a conveniencia del gobierno de turno. Por ejemplo un ciudadano que se afilió al Seguro de Jubilación, hace 35 años; al jubilarse luego de una aportación por 30 años, debía recibir el equivalente a 3 sueldos básicos mensuales. Hoy, ha tenido que trabajar 5 años más y solo recibe una suma menor, que un sueldo básico. Todo, por las sucesivas modificaciones de la Ley de Jubilación. El jubilado tiene que acudir al Poder Judicial para que respeten sus derechos y, eso cuesta. A uno de ellos, al señor Ubilde Suárez Cornejo le ha costado la vida. ¿Es eso justo, señor Alan García? ¿Ustedes los apristas, solo saben crear inflación? ¡Ya déjense de repartir bolsitas de alimentos, por las madrugadas, y acaben con el trato injusto a los jubilados! Y a todo esto...¿Qué dice el ilustrísimo Colegio de Abogados de Lima? Algo debiera decir...¿Verdad?

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