BONANZA ECONOMICA Y...¿LOS POBRES?

Los diarios escritos, de la capital, anuncian que el Perú está viviendo un auge económico, muy importante. Sin embargo la pobreza, en los sectores populares, sigue en aumento. Las calles, cada vez se ven abarrotados de delincuentes, mendigos, “lavacarros” al paso y vendedores de chucherías y...nadie, hace nada para eliminarlos. Los ricos, siempre, peleando a brazo partido por ser más ricos, los funcionarios del gobierno aferrándose, con uñas y dientes, a sus cargos. El ministro de educación peleándose con los maestros, la ministra de turismo, haciendo lo mismo, con los cusqueños y… el ministro de la producción, ¿produce algo? En el gobierno anterior el ministro de economía esperaba, que a los de abajo les “goteara” algo de la gran cantidad de dinero que ganaban, los de arriba. ¡Que iluso! (o debería decir, ¡que hipócrita) si se sabe bien que los peruanos ricos, incluido él, se van de compras a Miami; donde dejan hasta las propinas. De modo que aquí, ¿qué puede chorrear? Señores del gobierno, la solución para combatir la pobreza extrema, es fácil: Hay que crear empresas estatales, en los rubros mas simples, correos, limpieza pública, mantenimiento de calles y jardines, limpieza del cauce del río; etc. etc. Con esos empleos, esa gente se ganaría, dignamente, su sustento y el de su familia, podría acceder a los seguros de salud y jubilación. El vaso de leche y los comedores populares, parecen la solución más fácil; sin embargo no lo son. Atentan contra la dignidad de la gente, los vuelven enemigos del trabajo, se crean mafias y todo de tipo de corrupción; entre quienes administran tales programas. Ya se lo que van a decir, respecto a lo que propongo: El Estado es un mal administrador y otros argumentos parecidos. EL Estado, no tiene por que ser mal administrador. Lo que ha ocurrido, en anteriores ocasiones, es que no se han utilizado a las personas idóneas; para el cargo. Además nunca se castigó, como se debe hacer, a quienes hicieron fracasar las empresas públicas. Por ejemplo, la Compañía de Teléfonos es una mina de oro puro, pero como empresa peruana, fue un fracaso. Se han preguntado ¿Por qué?. La respuesta es obvia, existían intereses para hacerla fracasar y luego, privatizarla. Eso, es el Perú; señores del gobierno, linda ocasión para cambiar nuestra historia.