martes, 11 de febrero de 2014

EL CASO ALAN GARCÍA PEREZ------------------------------------------------------------- El partido “Aprista Peruano, cuando fue fundado, posiblemente, tenía como objetivo acabar con los abusos y latrocinios de los políticos de entonces. Personalmente, he conocido apristas honestos, imbuidos del más sano patriotismo, muchos de ellos, simples obreros que por defender sus ideas dieron con sus huesos, en cárceles pestilentes; destruyendo el futuro de su familia. Todo, por creer en el apostolado de sus jefes. Con el trascurso del tiempo, el APRA parece haber renegado de sus principios patrióticos y quienes los dirigen, hacen una política, totalmente reñida de aquellos principios. Lo afirman, el señor Vargas Haya, el hijo de uno de los líderes de los años heroicos de Apra y muchísimos ex apristas. Hoy los jefes se enriquecen y los militantes, según su importancia, solo aspiran a algún puestito; dentro de la estructura gubernamental. Casi siempre, es difícil probar la deshonestidad de un político; sin embargo el ser humano, está dotado del poder de razonamiento y la deducción; esto es, que hay mil modos de conocer la conducta de la gente. Ya Jesucristo, entre muchas frases sabias, dijo, “por sus frutos los conoceréis”. En el caso del señor Alan García, hay muchas cosas que lo incriminan: la ilegal venta del Aeropuerto de Collique, los excesivos gastos de dinero público, en la ¿reconstrucción? De los colegios emblemáticos, contrataciones irregulares en obras, como el agua potable y la construcción de viviendas (ejemplo, las del cuartel Barbones). Los petro-audios, la liberación fraudulenta y previo pago en dólares, de presos por narcotráfico; etc, etc. El señor García, tiene defensores, entre ellos el señor Mulder. ¿Quién es?, ¿de dónde salió?... ¿Quién sabe? Y según su lógica, por supuesto, queriendo agraviar a los miembros de la Megacomisión, hasta los electores de los congresistas que investigan a García, serían delincuentes. Este “amigo fiel” del hombre, interpreta la constitución a su manera y en su desesperación; da mordiscos a diestra y siniestra. Señor lector, usted juzgue y saque sus propias conclusiones. Ah… ¿No les parece, que ya llegó la hora para que estos politicastros, trabajen en algo útil y dejen de vivir del Estado? Y… ¿Dónde se habrán metido Zumaeta y del Castillo? Otros... “chupatetas” del pobre Perú.

No hay comentarios: