Los robos y asaltos, en la ciudad de Lima, Trujillo, Chiclayo; etc. Se han convertido en un gravísimo problema; ante ellos y por el momento, la policía se muestra impotente. Las verdaderas causas de este problema, son muchas. Para empezar; el hombre para llevar una vida sana, en todos los sentidos (física, mental y socialmente) necesita de bastante espacio y en lo que llamamos ciudades modernas, vivimos, prácticamente, hacinados; especialmente en los barrios marginales, en un habitáculo construido con cartones y retazos de plástico habitan familias de ocho o mas miembros y no cuentan con servicios básicos, como son el agua y el desagüe. Es lógico que esta gente viva resentida y sus niños al crecer, sin educación y sin guía, formen pandillas. Nuestra población está creciendo tanto, que en pocos años más, no nos alcanzará el agua, ni los alimentos. Aquí, es necesario imponer el control de natalidad. Otras causas, por las que existen estos delincuentes son: la droga, el alcohol, los casinos de juego y las cárceles mal manejadas. En las cárceles se debería obligar, a los presos, a que trabajen y se ganen el sustento. La ociosidad es madre de malos pensamientos y la sociedad no tiene por qué mantener, a quienes le hicieron daño.
A nuestra policía, se les debe pagar un sueldo razonable y dotarlos de entrenamiento, armas y tratarlos con el respeto que merece, el que bien sirve a la sociedad
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Hace 7 años
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