EL MUNDIAL DE FUTBOL HA FINALIZADO

Hace más de una semana que ha finalizado el Campeonato Mundial de Fútbol. Lo ganó España; de la forma mas limpia y merecida. No necesitó emplear esas artes vedadas, muy utilizadas por los equipos del río de La plata. (usar la mano, para conseguir o evitar los goles) Equipos grandes como Italia, Inglaterra, Argentina, Brasil y Portugal se fueron muy temprano. El entrenador Brasileño jugó un fútbol muy conservador y su estrella el gran Kaká , no funcionó para nada; estuvo hecho una caca. El equipo argentino cuenta con muy buenos futbolistas, pero cada uno de ellos juega… para “su santo”. De ese modo, sacrificaron a Messi, actualmente, el mejor futbolista del mundo. ¡Urgente! Necesitan un verdadero entrenador. Las selecciones de Italia e Inglaterra necesitan una renovación total. Alemania, con jugadores jóvenes ha conformado un gran equipo, que en el futuro dará mucho que hablar. Uruguay, con un equipo que clasificó con las justas, disputo las semifinales, los uruguayos siguen conservando su estilo de juego a base de fuerza, mañas y terquedad. Paraguay ha jugado con prestancia y, creanme, si hubiera contado con Cabañas, otro hubiera sido su cantar. Holanda, sus primeros partidos, los jugó con solvencia; hasta eliminó a Brasil; pero en el último partido, el más importante, jugaron a la matonería. Ante la superioridad técnica de los españoles, no tuvieron otro argumento que la patada artera y hasta criminal (aquella de Jong contra Alonso) El árbitro, un gilipollas, debió sacar tarjeta ante la primera falta de los holandeses y quizás, habríamos visto un partido de fútbol decente y bien jugado; por ambos equipos. La FIFA ya debe proporcionar ayuda tecnológica a los árbitros. No es justo que se anulen goles bien conseguidos, porque los jueces, desde su posición en el campo de juego, no lo hayan visto o los goles conseguidos en evidente fuera de lugar, se den por válidos. Otra cosa, el fútbol es un deporte para ser jugado con los pies, la cabeza y cualquier otra parte del cuerpo, menos con las manos. Todo jugador que utilice las manos para tocar la pelota o agarre al contrario, para impedir su libre movimiento, debiera hacerse acreedor a una tarjeta amarilla y si vuelve a incurrir en la misma falta debe ser expulsado del campo de juego. Todavía mas, si un jugador que no es el arquero usa las manos para que la bola ingrese al arco, automáticamente debe contarse como gol. El expulsar al culpable y cobrar penal, no favorece al equipo atacante. Ya lo vimos en el partido Uruguay VS. Ghana.